Por: Agencias
Ciudad de México
El rascacielos mexicano atiende en sus miradores y restaurantes de los cuatro pisos superiores a mil 500 visitantes semanales.
La Torre Latinoamérica, el edificio más emblemático de Ciudad de México, será convertido en un hotel y su restauración será concluida con el bicentenario de la independencia nacional, en septiembre del 2010.
Informaciones proporcionadas a la prensa por su actual administrador, Pedro Fossas, precisan que la reconstrucción de la edificación forma parte de la reanimación turística del Centro Histórico del Distrito Federal.
Como área de hospedaje serán habilitados 19 de sus 48 niveles (de la planta 16 a la 35), con una disponibilidad de 136 habitaciones, que convivirán con 15 plantas que ocupan oficinas de telecomunicaciones y otras que son sedes de compañías de seguros.
Construido hace 53 años y considerado como un edificio inteligente, al estilo del Empire State neoyorquino, en la época en que fue edificada, la Torre Latinoamericana costó 720 millones de pesos (hoy unos 56 millones de dólares).
En su restauración, para convertirlo en hotel, se invertirán a partir de noviembre unos 160 millones de pesos (12,5 millones de dólares).
Actualmente en la Torre, con una altitud de 181,33 metros y 24 mil 100 toneladas de peso, laboran unas mil 200 personas y en el área hotelera serán empleadas otras 160 trabajadores.
El rascacielos mexicano atiende en sus miradores y restaurantes de los cuatro pisos superiores a mil 500 visitantes semanales.
La Torre Panamericana pasó la prueba de los terremotos que sacudieron la capital mexicana en 1957 y 1985, y mantendrá en el futuro como atractivo el salón de exposición fotográfica de su planta 38, donde se muestran paisajes del Distrito Federal.
En su próxima etapa, el edificio dispondrá de un nuevo sistema contra incendios y una moderna iluminación externa, cuyos efectos le permiten cambiar en breves instantes de color (azul, verde o lila), ingenio que ya fue probado semanas atrás.
Ciudad de México
El rascacielos mexicano atiende en sus miradores y restaurantes de los cuatro pisos superiores a mil 500 visitantes semanales.
La Torre Latinoamérica, el edificio más emblemático de Ciudad de México, será convertido en un hotel y su restauración será concluida con el bicentenario de la independencia nacional, en septiembre del 2010.
Informaciones proporcionadas a la prensa por su actual administrador, Pedro Fossas, precisan que la reconstrucción de la edificación forma parte de la reanimación turística del Centro Histórico del Distrito Federal.
Como área de hospedaje serán habilitados 19 de sus 48 niveles (de la planta 16 a la 35), con una disponibilidad de 136 habitaciones, que convivirán con 15 plantas que ocupan oficinas de telecomunicaciones y otras que son sedes de compañías de seguros.
Construido hace 53 años y considerado como un edificio inteligente, al estilo del Empire State neoyorquino, en la época en que fue edificada, la Torre Latinoamericana costó 720 millones de pesos (hoy unos 56 millones de dólares).
En su restauración, para convertirlo en hotel, se invertirán a partir de noviembre unos 160 millones de pesos (12,5 millones de dólares).
Actualmente en la Torre, con una altitud de 181,33 metros y 24 mil 100 toneladas de peso, laboran unas mil 200 personas y en el área hotelera serán empleadas otras 160 trabajadores.
El rascacielos mexicano atiende en sus miradores y restaurantes de los cuatro pisos superiores a mil 500 visitantes semanales.
La Torre Panamericana pasó la prueba de los terremotos que sacudieron la capital mexicana en 1957 y 1985, y mantendrá en el futuro como atractivo el salón de exposición fotográfica de su planta 38, donde se muestran paisajes del Distrito Federal.
En su próxima etapa, el edificio dispondrá de un nuevo sistema contra incendios y una moderna iluminación externa, cuyos efectos le permiten cambiar en breves instantes de color (azul, verde o lila), ingenio que ya fue probado semanas atrás.
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