Se desmayó cuando rendía su declaración preparatoria
VÍCTOR ZÁRATE
El Juez Cuarto en materia penal dictó auto de formal prisión a Mirna Morales Iñiguez, como presunta responsable del delito de fraude genérico cometido en agravio de Ana Laura Martínez Silva.
Con la captura de la presunta defraudadora quedó en entredicho la seguridad de la Penitenciaría Central en donde se carece de servicios médicos.
En la rejilla de prácticas del Juzgado Cuarto de lo Penal cayó desmayada Mirna Morales Iñiguez, quien se encontraba escuchando las constancias del expediente penal instruido en su contra por fraude.
El personal del Juzgado Cuarto de lo Penal, por medio de celadores de la Penitenciaría mandó a traer a la acusada Mirna Morales Iñiguez para que rindiera su declaración preparatoria.
Mirna Morales Iñiguez había escuchado la denuncia de Ana María Martínez Silva, vecina de la segunda privada de la calle de La Noria número 420 de esta ciudad, quien la acusa de haberla estafado con tres mil 500 pesos.
La ofendida señaló que Irma Morales le había asegurado que era espiritista y que mediante algunas limpias le solucionaría los problemas que la aquejaban pero todo resultó una farsa, por lo que pedía se procediera penalmente en su contra.
Mirna Morales Iñiguez se apreciaba tranquila pero cabizbaja escuchando la voz del secretario judicial que le leía las declaraciones de testigos que deponían en su contra cuando de pronto se desplomó pesadamente al piso.
Todos comenzaron a gritar para que acudieran en busca del personal médico del reclusorio pero los minutos transcurrieron y regresaron los celadores para señalar que el área de enfermería se encontraba vacía.
Sin la mínima preparación para atender casos de emergencias médicas, dos celadores levantaron a la acusada y decidieron regresarla a su celda, mientras que el personal del juzgado señaló que diferiría la hora de la diligencia.
Al realizar un análisis de las constancias, el titular del Juzgado Cuarto de lo Penal dictó auto de formal prisión a Mirna Morales Iñiguez, como presunta responsable del delito de fraude genérico.
VÍCTOR ZÁRATE
El Juez Cuarto en materia penal dictó auto de formal prisión a Mirna Morales Iñiguez, como presunta responsable del delito de fraude genérico cometido en agravio de Ana Laura Martínez Silva.
Con la captura de la presunta defraudadora quedó en entredicho la seguridad de la Penitenciaría Central en donde se carece de servicios médicos.
En la rejilla de prácticas del Juzgado Cuarto de lo Penal cayó desmayada Mirna Morales Iñiguez, quien se encontraba escuchando las constancias del expediente penal instruido en su contra por fraude.
El personal del Juzgado Cuarto de lo Penal, por medio de celadores de la Penitenciaría mandó a traer a la acusada Mirna Morales Iñiguez para que rindiera su declaración preparatoria.
Mirna Morales Iñiguez había escuchado la denuncia de Ana María Martínez Silva, vecina de la segunda privada de la calle de La Noria número 420 de esta ciudad, quien la acusa de haberla estafado con tres mil 500 pesos.
La ofendida señaló que Irma Morales le había asegurado que era espiritista y que mediante algunas limpias le solucionaría los problemas que la aquejaban pero todo resultó una farsa, por lo que pedía se procediera penalmente en su contra.
Mirna Morales Iñiguez se apreciaba tranquila pero cabizbaja escuchando la voz del secretario judicial que le leía las declaraciones de testigos que deponían en su contra cuando de pronto se desplomó pesadamente al piso.
Todos comenzaron a gritar para que acudieran en busca del personal médico del reclusorio pero los minutos transcurrieron y regresaron los celadores para señalar que el área de enfermería se encontraba vacía.
Sin la mínima preparación para atender casos de emergencias médicas, dos celadores levantaron a la acusada y decidieron regresarla a su celda, mientras que el personal del juzgado señaló que diferiría la hora de la diligencia.
Al realizar un análisis de las constancias, el titular del Juzgado Cuarto de lo Penal dictó auto de formal prisión a Mirna Morales Iñiguez, como presunta responsable del delito de fraude genérico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario